martes, 19 de julio de 2016

Las fases del duelo

Negación.

No puede ser. Otra vez no. Es imposible. Dos veces seguidas es demasiado cruel. Debe ser un sueño. Voy a despertar, seguro que cuando lo haga, Juanfran a marcado ese penalti y seguimos con vida. Seguro que cuando lo haga, Gabi estará levantando esa Copa y todas estas lágrimas habrán merecido la pena.

Ira.

Golpeo la pared con rabia. Pataleo. Intento ahogar un grito pero termino desgarrándome la garganta. No encuentro consuelo, no encuentro piedad. No me sirven las alabanzas, ni las palmadas en la espalda. Quisiera romper el mundo, salir corriendo y gritar en soledad. Al fin y al cabo, la frustración me impide ser un ser racional.

Negociación.

Busco un lugar para la reflexión. Me encojo ante el silencio. Lo que no tiene solución no tiene solución. Y duele. Pero hay que empezar de nuevo. Buscar de nuevo. Encontrar de nuevo. Fue una gran competición. Les ganamos a los mejores y ellos fueron pasando rondas contra las opciones más fáciles del bombo. Intento convencerme de algo. Intento convencerme de que el dolor no debe ser para tanto cuando sabes has entregado el alma.

Dolor.

Es difícil de entender. Más difícil de explicar. El corazón supura, el alma suspira. La garganta está muda y los dientes permanecen apretados. El recuerdo es dolorosamente imborrable, el momento fue emocionalmente insoportable. No podría repetirlo, aún así me encantaría volver al lugar e intentarlo de nuevo. Aunque el dolor que me mueve es tan intenso que el miedo se apodera de los sentimientos ¿Y si volviesemos a caer de la misma manera?

Aceptación.

Todo termina pasando y es cuando te das cuenta del hecho cuando valoras la situación. Perdimos, sí, pero lo hicimos luchando. No nos ganaron por la mano, lo tuvimos, lo rozamos, lo merecimos. Estuvimos ahí, en la pelea, en el momento álgido del año. Muchos quisieron llegar y nosotros fuimos protagonistas durante gran parte de la temporada. Eso es orgullo. Ese el camino por el que debemos seguir caminando. Volveremos. Debemos hacerlo.