jueves, 28 de enero de 2021

Un nuevo milagro

Temblaba cada vez que jugaba. Le observábamos la mirada y descubríamos temor, pánico escénico, ganas de salir corriendo de nuevo hacia el túnel de vestuarios. El balón le quemaba en los pies y tan nubladas estaban sus percepciones que, generalmente, tardaba demasiado en decidir y siempre decidía mal. Un regate a medias, un pase fácil a los pies del contrario, una carrera absurda, un cuerpeo perdido. Y siempre llegaba un segundo tarde a la presión.

Ahora se muestra firme, decidido. En su mirada hay ganas de competir, de apretar los dientes, de ser el primero en empezar a correr y ser el último en aparecer por el túnel. Busca el aplauso, la conformidad, la confirmación definitiva de que aún se acuerda de jugar al fútbol. Filtra balones con facilidad, no se complica en exceso pero ha dejado de perder balones tontos y ha conseguido que, con su esfuerzo, se haya convertido en uno de los pilares de la presión del equipo. Le ha quitado el puesto a Saúl y es el oxígeno que encuentra Koke en tres cuartos cuando no tiene clara la iniciación de la jugada.

Thomas Lemar ha cambiado. Y ninguno lo esperábamos porque todos le dábamos por terminado. De repente, no sólo ha aprendido de nuevo a jugar sino que se ha sentado delante de un periodista para decirle que el Atleti es esfuerzo y que él está dispuesto a esforzarse hasta el máximo. Le teníamos muchos milagros apuntados al Cholo pero este, por inesperado, es uno de los más increíbles. Y luego, que por qué le veneramos.

lunes, 18 de enero de 2021

Convertir el drama en ventaja

Que la eliminación en Copa ha sido un traspié, no lo vamos a negar, que incluso se puede tildar de drama

por contra quien se ha producido, también se puede asumir, que durante mi trayectoria como aficionado la Copa nos ha dado alegría supremas, es tan cierto como que no deberíamos haber renunciado a ella de esta manera y que, llegados a este punto, deberíamos convertir el drama en ventaja y aprovechar los miércoles de descanso en enero para afrontar el reto de la liga.

Porque sí, porque puede que no seamos los grandes favoritos, porque no se puede serlo cuando compites contra los dos equipos más poderosos del mundo, pero hemos llegado al final de la primera vuelta con el vacuo título de invierno en el bolsillo y con verdaderas posibilidades de luchar por el título después de más de un lustro y esto no se puede desaprovechar, no se debe escatimar esta opción.

Y en esta lucha sin cuartel, en esta carrera de fondo con trampas y barro, habrá que aprovecha cualquier atisbo de ventaja y si la nuestra, en enero, será la de descansar más que los demás, habrá que aprovecharla, porque ya llegará febrero con su Champions y sus partidos atrasados y ahí deberemos estar lo más alto posible para saber afrontar el reto en las mejores condiciones. Así que sequemos los ojos por la eliminación copera y apretemos los dientes ante el reto mayúsculo que nos espera.