martes, 3 de agosto de 2021

Esperando la Heitingada

Llegará, que nadie lo dude. A los dirigente del club les gusta apurar las últimas horas del mercado pero no para comprar sino para vender. Para verse con las manos atadas y decir así que no han tenido tiempo de reaccionar, que tenemos un elemento menos pero que, para ellos, lo que verdaderamente cuenta, es que tienen un poquito de dinero más. Porque se ahorran una ficha y, de paso, trincan por un traspaso que, a esas alturas, ya nadie puede esperarse.

Mi apuesta en Trippier. Lo digo para que a nadie le pille de susto y no vengan a llamarle rata como ya hicieron con Thomas. Porque la Heitingada, llamada así por la venta de Heintinga a pocas horas del cierre del mercado, sin sustituto que ocupase su lugar, se ha ido repitiendo en el tiempo con nombres varios pero siempre con el mismo final: un activo menos y un pasivo más. Así funciona la gestión del Atleti.

Así pues, que nadie pierda el tiempo con nombres y renombres. Te hablan de un nueve suplente, de un lateral izquierdo o quizá de un medio defensivo. Humo. Lo realmente importante es lo que está a punto de salir, que es Saúl y lo que saldrá cuando el mercado llegue a su fin, esa Heitingada que ya tuvo nombre de Raúl García, Augusto o Thomas en el pasado y que probablemente tenga nombre inglés en este presente. Por eso, cuando el Atleti está en lo más alto, antes de pensar en fichajes hay que juntar las manos y decir aquello de: Virgencita, que me quede como estoy.

No hay comentarios: